“Alianza legitima” por el poder.

Al día de hoy se perfilan dos alianzas que aspiran por hacerse de los votos de los mexiquenses el 3 de julio. Por un lado está la eventualmente integrada por el PAN y el PRD, por el otro el PRI, Verde y PANAL.

Extrañamente el debate y las críticas hacia el mecanismo de alianzas, orquestado por el PRI, inicia justo cuando estas han hecho caer caciquismos y dictaduras del revolucionario en estados donde hasta el 2010 tuvieron alternancia en sus gobiernos. El oportunismo retorico del PRI de hoy se hace más evidente si recordamos que este se unió alternativamente con partidos pequeños en el Siglo XX, sin reparo en la ideología.

Los argumentos con los que el revolucionario, revela su miedo contra el esquema de alianzas constan en los siguientes:

1. Incongruencia ideológica al unirse izquierda y derecha

2. Como PAN se une con el PRD, si en el 2006 se insultaron e incluso una parte del partido no reconoce al presidente Calderón como tal y lo llama “espurio”.

En el primer caso el revolucionario evidencia su ignorancia de los sistemas políticos, de la historia mundial en contra de Estados totalitarios, las condiciones de pluralidad y de acuerdos o simplemente manipula el discurso hacia un mecanismo que claramente le reduce oportunidades de victoria en los estados del país, a los cuales el revolucionario institucional ve como fuente de recursos. No existe ninguna incongruencia, no habrá fusión de partidos, si veremos un efectivo y necesario recurso para llevar la democracia y alternancia a estados que desde la llamada “Revolución”, han sido gobernados por el partido de los caudillos, el PRI.

En el segundo argumento, habremos de considerar que el PRD del 2006 estaba supeditado al criterio y víscera del que pensaban “mesías”, como hoy está supeditado el PRI a Peña Nieto y a sus movimientos, así lo estuvo el del sol azteca. Por lo tanto López Obrador impuso su retórica de rompimiento y esquizofrenia, es decir, las condiciones de negociación entre PAN y PRD demuestran y reflejan un ánimo de memoria lucida, de aspiración democrática y de responsabilidad con el país, pues nadie como el PAN y como el PRD conocen la represión y la furia de un Estado totalitario y represivo.

Con Moreira, el PRI lleva a tal nivel su crítica a la alianza del PAN PRD llamándola “espuria”, utilizando no solo las técnicas de AMLO, sino hasta su lenguaje, viviendo hoy por hoy un efecto boomerang, pues la sociedad se da cuenta de que Humberto castiga su lengua a mordidas.

Los estatutos del PRI se reforman con la llegada de Beatriz Paredes al CEN, a partir de ese momento se dicen “socialdemócratas” pues pretendían ir al parejo del auge de la izquierda en el mundo. No paso mucho tiempo cuando demuestran ser incongruentes al prohibir en estados, banderas de la izquierda, como el aborto y los matrimonios entre homosexuales, en el caso del Verde recientemente propuso, muerte a secuestradores, iniciativa que seguramente el PRI no avalaría pues la política ideológica pendular del revolucionario solo se mueve según las tendencias en las encuestas, incongruencia ideológica.

Moreira tal vez no recuerda, que en el 2003 Elba Esther Gordillo fue insultada, minimizada y por ultimo expulsada del PRI, por lo que funda el PANAL y apoya enteramente a Calderón en el 2006 y en las elecciones de 2010 formo parte de la “Alianza espuria” en clara afrenta y lucha contra el revolucionario, hoy con el PRI en clara incongruencia entre quienes se insultaron y pelearon hace poco.

Al parecer solo Moreira tiene la fórmula para juntar el agua y el aceite en una alianza. Esta unión de partidos tiene una aire diferente a la del PAN-PRD, yo si la veo congruente, sin duda refleja el interés de los tres partidos para hacer política, una “Alianza legitima” por el poder ¡

La permanencia de un partido en el gobierno durante 82 años, no puede ser democrático, la realidad en este caso es que la democracia y la alternancia son el agua y el PRI en su “Alianza legitima” por el poder, son el aceite, estos nunca se han mezclado.

El agua democrática no se mezclara con el aceite autoritario revolucionario, de ello no tengo la menor duda, también tengo la certeza de que la sociedad está a favor de un cambio, como lo demuestra el apoyo a la Alianza PAN-PRD.

Con votos los mexicanos están dando señales que no van con una “Alianza legitima” por el poder, ellos están a favor de la alternancia y la democracia en México y el siguiente en la lista es el Estado de México que vivirá la democracia por primera vez en 2011.

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