"El Manual de Moreira"

Humberto Moreira, hoy es el nuevo presidente electo del PRI después de una larga campaña rumbo a la Presidencia de la Republica.


Esta usted leyendo bien, el ex gobernador de Coahuila estuvo durante un buen rato pugnando por la candidatura presidencial de su partido, pero se topo con el dique mediático Peña Nieto y no tuvo más remedio que suceder a Beatriz Paredes, haciendo un gran esfuerzo por “unir” al partido.


Realizo estudios de Normalista en Coahuila, además de diversos diplomados en la Ibero y el ITAM. La carrera del profesor Humberto Moreira comenzó en 1985 en una secundaria técnica, después dio el salto a la SEP ocupando diversos puestos siendo el más alto, el de secretario particular del Sub Secretario de Educación Básica.


En 1999 fue designado Secretario de Educación Pública de Coahuila, en 2002 fue elegido presidente municipal de Saltillo y en 2005 gobernador del estado venciendo al hoy embajador en España, el panista Jorge Zermeño.


Después de un bombardeo de spots donde Moreira nos pintaba a Coahuila como un Oasis en medio del panorama desolador mexicano, donde su entidad vivía un desarrollo que rompía los promedios nacionales, siendo la número 1 en todos rankings positivos. Logrando un posicionamiento nacional mas allá de sus bailes grotescos o de sus disculpas a “La Maestra”.


Peña Nieto debió haberse sentido amenazado después de las victorias aliancistas en 2010 y del protagonismo de gobernadores como Moreira, pero la mayor amenaza se presentaba en el terreno de la “unidad” del PRI, estas personalidades podrían representar, a mi juicio, un polo en contra de las aspiraciones de Gelboy, si este no se acercaba y más bien se distanciaba ignorándolos, creando un fenómeno similar al que provoco Roberto Madrazo.


Hubo muchas reuniones y cabildeos para bajarle los humos a los que pretendían crecer sin el aval del niño de Atlacomulco y siendo Moreira el mejor posicionado y en virtud de la “unidad” partidaria opto o fue optado para “pelear” por la dirigencia del PRI disminuyendo las ambiciones de Gamboa Patron quien ya se perfilaba desde la CNOP obligándolo a doblar las manitas, como gesto de “unidad”.


Como señal ultima del manual PRI ista de “unidad” el 23 de noviembre 2010 en la reunión de la CONAGO, Humberto Moreira fue bendecido por el “mesías” Peña Nieto, para dirigir a su partido (rasgo de unidad desprenderse de un contrincante y darle otro hueso nada despreciable).


La “unidad” hoy es el mayor objetivo del PRI, sin duda un objetivo nada despreciable pues les ha costado competitividad como en 2006, pero es un discurso al que recurren con insistencia, enseñando lo mucho que carecen de ella, una muestra fueron las disidencias que se mostraron en 2010 y que le costó al Revolucionario perder importantes entidades y estar cerca de perder otras tantas.


En las primeras declaraciones de Moreira, ya como presidente electo del PRI, se muestra enjundioso, exaltado, excitado con su nuevo puesto y con las nuevas atribuciones discursivas que el Presidente del PRI tiene.


Le revira al Secretario de Gobernación, con críticas al Gobierno de Calderón pero sin negar los dichos de Blake, más bien asiente implícitamente lo dicho por él y con un ánimo infantil nos dice “pero tú eres peor que yo, no me critiques”.


Al parecer el “manual” de Moreira lo lleva al ataque, privilegiando la “unidad” de su partido y dejando de lado las buenas prácticas democráticas e institucionales, lo orilla a denostar lo hecho por los demás y volver a las viejas prácticas del PRI autoritario tratando de callar las voces que señalan sus deficiencias.


El “manual de Moreira” tal vez no considera el rechazo de los mexicanos a esa clase de discursos golpeadores, que dan muchas portadas en los diarios pero son proporcionalmente adversos a quien los pronuncia, ejemplos claros son: AMLO, Noroña, y hasta Germán Martínez.


El “manual” de Moreira resulta a simple vista, recopilatorio de los métodos y recursos del viejo PRI, de este que se dice con nueva actitud, al tiempo veremos que Humberto dejara de lado su código pues notara que presidir a un partido nacional no presenta las mismas condiciones que su pequeño virreino que significaba Coahuila, que a partir de hoy estará bien cuidado por su hermano.


Bueno¡, tal vez esto fue inútil, quizá me confundí y su “manual” es de baile, no lo sé.

www.twitter.com/carlosdecimo

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